Cronos le cortó los huevos a Urano

En esta ocasión, relataré otra historia de la mitología griega, sobre una familia disfuncional.

Todo empezó con el caos primordial. Ya di detalles al respecto en este post, pero voy a concentrarme en el nacimiento de una diosa en particular.

Así es: Del caos nació Gea, la diosa de la tierra de anchas caderas. Pero Gea no estuvo sola durante mucho tiempo ya que, una noche, mientras dormía, engendró a su primer hijo: Urano, el dios del cielo.

¡Y se cogió a su vieja!

Y otra noche en que Gea dormía, Urano decidió fecundar… a su propia madre. ¡Esto ya empieza mal!

Así, Urano esparció una lluvia de esperma sobre Gea, que se depositó entre las grietas resecas de la tierra. De este acto nacieron los ríos y los lagos. Piensa en esto la próxima vez que tomes agua.

La noche siguiente, Urano repitió el proceso, y así nacieron las plantas, que comenzaron a brotar sobre toda la superficie de la tierra.

Urano hizo lo mismo la siguiente noche, y así nacieron los animales, que comenzaron a corretear por todos lados.

Y engendraron monstruos

Cuando Gea se dio cuenta de lo que había pasado, le propuso a Urano intentarlo con ella despierta. Pero esta vez algo salió mal: De aquella unión nació Briarero, el primero de los hecatónquiros, una raza de gigantes con 100 manos y 100 cabezas.

La noche siguiente nació Giges, el segundo hecatónquiro y la siguiente a esa, Coto, el tercero. Urano lo intentó 3 veces más y nacieron 3 cíclopes, que se llamaron Trueno, Relámpago y Rayo. Urano no estaba muy contento con el resultado, por lo que encerró a los 6 monstruos en el Tártaro.

Hijos mejor formados

Así que decidieron volver a intentarlo como la primera vez: con Gea dormida. Para que Gea se durmiera pronto, Urano hizo titilar a las estrellas a un ritmo de canción de cuna. Así nació el primer Titán: Océano.

En los siguientes intentos nacieron los demás Titanes: Ceo, Hiperión, Crío, Jápeto, Cronos, Tetis, Febe, Mnemósine, Tía, Temis y Rea.

La conspiración

Pero Gea ya estaba cansada de tener hijos y resentida con Urano por haber encerrado a los cíclopes y a los hecatónquiros. Así que intentó convencer a sus otros hijos, los titanes, de que enfrentaran a Urano.

El único que accedió fue Cronos y Gea le dio una hoz para que cortara las entrañas de Urano.

Así, cuando Urano intentó abrazar a Gea de nuevo, Cronos aprovechó la distracción para atacarlo con su hoz. Pero como no podía ver las entrañas de Urano, cortó lo único visible, que eran sus genitales.

Más hijos

Luego de castrar a su padre, Cronos arrojó los genitales al mar. Algunas gotas de sangre cayeron en la tierra y de ellas nacieron Alecto, Tisífone y Megera, las erinias negras, que persiguen a los hijos que matan a sus padres.

De otras gotas nacieron feos gigantes y ninfas de los fresnos.

De la sangre que cayó en el mar, nació Afrodita, diosa del amor.

Luego de este golpe de estado, Gea le dejó su lugar a Rea y Cronos gobernó en lugar de Urano. Por un tiempo, todo fue bien. Sin embargo, la historia se repetiría, pero ese es un relato para otra ocasión.

Bibliografía

Antes del principio, de Ariel Pytrell

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